La apendicitis aguda o apendicitis es una de las principales indicaciones de cirugía abdominal urgente, y se debe a una  inflamación del apéndice, que es un órgano con forma alargada de aproximadamente 5 a 10 cm de largo con un diámetro menor de 1 cm, que  nace cerca de la unión del intestino delgado con el intestino grueso o colon. Su mayor frecuencia de aparición es entre los 10 y 20 años de edad y es un poco más común en hombres que en mujeres. El apéndice puede enfermar debido a la obstrucción de su luz, lo que provoca que la presión dentro de ésta aumente llegando a provocar la activación de una cascada de eventos que incluyen la inadecuada circulación de sangre al área y un aumento de la  inflamación que puede culminar en la perforación del mismo.

La aparición de  dolor  abdominal es el principal síntoma, suele ser de tipo cólico, de inicio súbito, y puede iniciar a nivel del ombligo para después  ubicarse en la parte baja del abdomen del lado derecho; conforme avanza el cuadro, aparece la limitación al caminar y hasta al toser, generalmente suele asociarse a náuseas,  vómito, fiebre, falta de apetito e incluso  diarrea.

¿Cómo puedo saber si tengo apendicitis? El dolor abdominal agudo puede deberse a múltiples causas:

• Colelitiasis
• Colon irritable
• Diverticulitis
• Infección urinaria
• Obstrucción intestinal
• Enfermedad de Chron
• Quiste de ovario roto
• Absceso tubo-ovárico
• Enfermedad inflamatoria pélvica
• Embarazo ectópico
• Mittelschmerz o dolor durante la ovulación
• Endometriosis
• Cólico renal
• Torsión testicular

El retardo en el diagnóstico conlleva a que se puedan presentar complicaciones como perforación del apéndice y  que corra peligro la vida del paciente. La perforación del apéndice puede presentarse desde unas 24 a 72 horas de iniciado el cuadro, sobre todo en adultos  jóvenes; y llega a ser más peligrosa en pacientes pediátricos.

Para llevar acabo el diagnóstico, se requiere una adecuada  exploración física y un interrogatorio certero. Así como pruebas diagnósticas que incluyen estudios de sangre, ultrasonido y radiografias de abdomen y en caso de persistir la duda, se puede incluso pedir una tomografía.

El único tratamiento para un paciente con apendicitis aguda es la cirugía.